domingo, 27 de diciembre de 2009

Como siempre

Esta tarde estuve jugando fútbol. Terminó todo igual que antes. O quizá, como siempre, lo que quiere decir que nunca cambié, que todo fue un espejismo. Terminé gritando como un energúmeno, con la cara roja y desfigurada por la furia, con las venas de la frente hinchadas. Como siempre. No tolero perder, aunque sea la más intrascendente de las pichangas de domingo.

Me pueden apuntar con el dedo y decir que estoy mal, que uno debe saber ganar y perder. Cierto. Pero, voy a intentar explicar el porqué de mi actitud: no puede ser que cuando el equipo va perdiendo nadie luche. No puede ser que yo, con casi 30 años, corra, pelee cada pelota, ayude en ataque y defensa, y al lado mío, los que tienen 20 y un mejor estado físico, sólo esperen que les llegue el balón a los pies. Eso es lo que me revienta y me convierte en un hijo de puta cuando juego.

¿Por qué un jugador deja de luchar cuando va perdiendo, si debiera ocurrir todo lo contrario? Eso es algo que mi cabeza procesa y procesa, sin que pueda entenderlo. ¿No debería correr más, meter más, ponerle más corazón para revertir el resultado? Si el equipo perdió su fútbol, ¿acaso no hay que poner la garra, el pundonor, la dignidad deportiva? Ponerle huevos también le llaman a eso.

Nada más que decir.

6 comentarios:

Manomora dijo...

Y cuando llegué lo mismo de siempre: el refrigerador pasó susto. Como si me hubieran tenido 1semana amarrado, en ayunas.

magita dijo...

No me gusta el futbol, asi que cuando lo leí, se me vinieron otras imágenes a la cabeza (tremendos desvarios) cuando uno siente que va perdiendo, puede ocurrir dos cosas, seguir en la lucha o ser racionales y apáticos...en la vida, decía Nietszche no hay peor defecto del hombre que el de tener esperanza, que sólo logra prolongar el tormento, ya dejé de hablar de futbol, lo sé,por eso advertí con lo de tremendos desvarios, pero me recordó aquella frase, porque el ser humano finalmente es así,podemos luchar hasta el ultimo momento o quedarnos a la mitad del camino con lo brazos que aún nos quedan. El resultado puede ser el mismo, lo que cambia es el sentimiento que te pude dar ese resultado. Algunos lo pueden llamar un pensamiento mediocre, otros sabiduría como Nietszche.

Anónimo dijo...

Mi tío piensa exactamente lo mismo que vos. Y cuando pierde, mejor ni cebarle un mate jajá.
Es tan cierto eso que comentás: ¿el ir perdiendo no debería incentivar a los jugadores a ponerle más garra al juego? Mhm... quizás se desanimen un poco al ver que van en desventaja, lo que es comprensible... pero no una excusa.

Un saludo!!

Manomora dijo...

Magita: En 1er lugar, mis disculpas a todas por hablar de fútbol en el blog. Me consta que la mayoría de las mujeres lo odian. 2do, estoy en total desacuerdo con el pensamiento de Nietszche: sin esperanza la vida del hombre no tiene sentido. Si yo no esperara nada de la vida, créeme que ya habría intentado suicidarme. 3ro, en el liceo detesté Filosofía... y sólo recuerdo vagamente los nombres de algunos filósofos. Gracias por pasar!!
Chule: Seguro por ahí pasa el problema, por el desánimo. Pero hay que ser muy perdedor para que el desánimo impida luchar por un partido... creo yo. Saludos a tu tío, seguro debe ser un tipazo...jajaj. Gracias por pasar!!

Gabriel Cruz dijo...

Jejejejeje simpático tu comentario del refri :D. Vaya que desespera lo que comentas, que las personas, lejos de echarle más ganas, se derroten cuando las cosas no van bien y máxime cuando son chavalos como lo comentas, en ocasiones pienso si no es que le falta entusiasmo y pasión a las personas, pero bueno, vos no te rindas y darle a todo con mucha pasión...
¡¡Saludos!!..

Manomora dijo...

Gabriel, gracias por tu comentario. Quizá es cierto lo que dices, quizá a la gente hoy le falta pasión. Tal vez a algunas cosas le ponemos todas las ganas y, en cambio, las otras tareas, no menos inportantes, las enfrentemos con desinterés.

Saludos y Feliz 2010!